Restaurante Tatema, amando la brasa, tatemando con cariño

Guía Restaurantes a la brasa

Restaurante Tatema, amando la brasa, tatemando con cariño

Estamos en Lavapiés, el barrio multicultural por excelencia de la capital. Y estamos en la Calle Argumosa, una calle para hacer “terraceo” y mezclarse. Si no, mejor no vayas. Allí se abre a finales del 2019 el restaurante TATEMA, con la base de una cocina al carbón de encina que, sin embargo, se aleja por completo de los asadores tradicionales. No es un sitio de echar grandes piezas caras a la parrilla, es otra cosa y mucho más.

Tatema es una técnica para cocinar el alimento de los primeros pobladores de México, que podríamos traducir por chamuscar, poner al fuego o tostar. Tatemando zanahorias en crudo les sale uno de sus platos más representativos: la ensalada de zanahorias asadas, baba-ganoush y cacahuete tostado. O la mazorca tatemada, polvo de palomitas, parmesano y mayonesa cítrica. Un plato divertido, para mordisquear con fruición.

Por la brasa pasan otros de sus platos, como el pollo a la parrilla con emulsión de limón, la brocheta satay de pollo con salsa de cacahuete, la cuadrita de cuadril o la entraña marinada al momento con patatas fritas. Entraña servida con un chimichurri histórico, como aquel que dice, ya que tiene más de 1.500 días, puritita reserva de chimichurri. Otros platos se acercan levemente al calor, como el bonito curado (tatemado muy brevemente por arriba) con salmorejo y piparras.

Lo que han conseguido Lucho, Rodrigo y Diego ha sido una cocina de sabores viajeros, donde las especias y las salsas son una constante, con algunos platos vegetarianos (de esos de chuparse los dedos sin echar de menos nada), pasando por la cocina mejicana, argentina o asiática. Con la constante de poder compartir los platos, la mayoría tienen la posibilidad de pedirse por medias raciones o en formato tapa, con precios más que comedidos. De chuparse los dedos es también el provolone fundido (al horno de carbón de encina) sobre salmorreta ahumada, el brócoli frito con aliño de sésamo y lascas de queso curado, la berenjena en dos cocciones (una en brasa) con emulsión de miso rojo y pimentón (de escandalosa melosidad), o el taco vietnamita de pork belly con encurtidos y toque picante. Memorable el ajoblanco con alcachofas a la brasa y jamón.

Acaban de incorporar a la carta y merece mención especial el tiradito de salmón con fondo de sambaizu (una marinada típica del tataki en Japón, que aquí personalizan). A partir de una brevísima fritura del salmón al revés con aceite aromatizado con ajo, romero y carbón encendido, el plato se completa con una mahonesa de ají amarillo, cebolla morada encurtida y toques de cebolleta china. Un plato con sello propio.Esta cocina de relamerse hay que rematarla con alguno de sus postres, como la piña tatemada a la parrilla, sobre fondo de sopa de coco y helado de chocolate blanco, con ralladura de lima y emulsión de aceite de arbequina, vinagre de Jerez y hierbabuena. O la torrija caramelizada en seco (y sin fritura) con helado de galletas Lotus y polvo de galletas Lotus (el toque resulta de los más simpático).

Y por supuesto empezarla, continuarla y acabarla con alguno de sus cócteles, aunque aquí la elección se complica: ya solo por su Michelada merece la pena la visita, pero su Piña Colada (con piña asada) es de diez y el Bloody Mezcal ni os cuento. Por no hablar de la Paloma de albahaca (con Tequila), si queremos seguir en modo mex. Preguntad por los vinos, pocos, pero elegidos.

Datos de contacto

Restaurante Tatema
Calle de Argumosa, 11 - 28012 Madrid
No hay datos
info@tatemamadrid.com
910 96 88 55